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La Bronquiolitis

La Bronquiolitis es la afección respiratoria pediátrica más frecuente. Es un síndrome que afecta en un 70-80% de los casos a niños menores de dos años. Por lo general se produce por una infección viral del tracto respiratorio que afecta a las vías aéreas más pequeñas del árbol bronquial llamadas bronquiolos. A partir del segundo año de vida, el tamaño de estos bronquiolos aumenta y los problemas de obstrucción respiratoria pasan a llamarse bronquitis. El virus se propaga por vía aérea, o por contacto directo con elementos que hayan estado infectados (juguetes, chupetes…), contagiando de este modo al bebé.

Generalmente se inicia con infección en las vías aéreas altas (nariz y garganta) para posteriormente en un periodo de 2-4 días asentarse en las vías bajas (pulmones), causando problemas respiratorios como inflamación, edema y producción de moco.

La sintomatología es diversa pero cursa generalmente con:

  • Fiebre
  • Tos
  • Disnea (dificultad para respirar)
  • Respiración rápida
  • Sibilancias y crepitaciones: son sonidos que a veces pueden ser audibles sin fonendoscopio a nivel pulmonar, pueden ser en forma de silbido y otras en forma de acúmulo de secreciones o moco.
  • Cianosis: aspecto azulado de la piel, uñas o las mucosas de la piel como los labios (en ocasiones).
  • Hiper inflación del tórax del niño

La bronquiolitis a veces puede ser grave, con lo que el examen médico es fundamental para establecer un control necesario del bebé, el cual puede consistir en una auscultación y valoración física así como pulsioximetría, cultivos del moco y radiografía de tórax.

 

Tratamiento

Está orientado a mejorar la calidad respiratoria:

  • Medicación sintomática: antipiréticos
  • Suplemento hídrico moderado y suero salino hipertónico
  • Fisioterapia respiratoria: con el objetivo de drenar y eliminar las secreciones, permitiendo un correcto intercambio de gases, evitando complicaciones y posibles reinfecciones.
  • Broncodilatadores : orientados a dilatar los bronquiolos y que permitan el paso del aire ( no siempre tienen un buen resultado en niños tan pequeños)

La evolución es generalmente benigna y se recupera la funcionalidad al cabo de una semana. Aunque la tos pueda persistir durante más tiempo. Es fundamental un tratamiento médico adecuado conjuntamente con la fisioterapia respiratoria para mantener las vías respiratorias libres de mocos y evitar posteriores infecciones.

Autor: Laura Saura

Fisioterapeuta col. 11282

  1. Postiaux, Fisioterapia Respiratoria en el niño. Madrid: McGraw-Hill – INTERAMERICANA DE ESPAÑA , S.A.U; 2000.

 

 

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